IMM17, o el de la suprema vagancia

Después de pasar una semana de vacaciones, donde las vacaciones deberían de ir más entrecomilladas que nunca, traigo otro IMM, en el que me siento tan vaga, tan vaga y tan vaga que no pienso ponerme a copiar los resúmenes de los libros, ancha es Castilla y más ancha es todavía la red donde seguro que los encontráis más amplios y detallados.


Como no he estado muy quieta, pues hay varias fotos, porque la foto de familia no se ha podido dar, alguno andaba de vacaciones o prestado o devuelto a la biblioteca.

El de campos de fresa (Jordi Sierra i Fabrá) me lo recomendó Maisha al saber (y quedarse escandalizada) que no había leído nada de este autor (una lástima que descubrí después por su reportaje, que fue el creador de la superpop, que fue mi revista de sobremesa durante unos cuantos años de mi adolescencia, eso debería de contar, ¿o no?, total, ya lo puso ella en su reportaje en el primer número de 7letras). Ya me lo he leído, me ha recordado un poco (pero poco) a si decido quedarme, porque no tiene capítulos sino horas, y en que trata la vida de una chica que está entre la vida y la muerte. En breve caerá reseña, aunque supongo que haya mucha gente que ya lo haya leído y sepa mejor de qué va. A mí me gustó mucho, como últimamente parece ser que estoy que lo tiro, pues nada, otro 5/5 se lleva.

El segundo fue casualidad, lo vi en la biblioteca (¿por qué Whisper nunca aparece en mi biblioteca? Eso tiene que ser una prueba de que es mejor que Isola (Isabel Abedi) o que lo quiere más gente o que los hados están en mi contra, que no sería la primera vez, y como odio reservar al ir a la biblioteca, porque me corta la libertad de revolver entre los libros y decidir cuál me quedo, pues nada, hasta que vuelva a la biblioteca y coincida conmigo en mi búsqueda). Otro que tendrá reseña en breve y que casi se lleva el 5/5 si no llega a ser por ese final, que otra vez no me resuelve todas mis dudas, y encima es autoconclusivo, ¿es un complot de los autores para amargarme la vida? Porque no puede haber un final cerrado, aunque no sea como la vida misma, yo aguanto los finales tristes perfectamente y los alegres igual, pero c-e-r-r-a-d-o-s, así que yo me vengo de ellos quitándoles puntuación.

Este ya no está a mano, dejémoslo en que pasó a descansar en un lugar mejor, no está de viaje conmigo, se quedó en casa. Es un poco infantil, pero a mí el tema de la mitología (tengo pendientes no uno, sino dos de ese mismo tema dentro de mis imm) siempre me ha gustado mucho, así que este al verlo perdido y falto de amor en el Corte Inglés le di un hogar en mi humilde casita. Es una trilología y como ya está leído, pues en breve (o eso espero, caerá la reseña).

Otro que está leído y del que no va a haber reseña porque no sé si no he entendido el humor o qué, pero sólo me ha  hecho gracia el primer capítulo el resto ni me ha llamado la atención y lo he leído entero, nada, os aviso de que a mí no me hacen gracia las películas en plan scary movie y demás y que también soy fanática de crepúsculo (que no de Meyer, porque mi amor por sus escritos terminó con noches de baile en el infierno, host ni lo he leído y La segunda vida de Bree tampoco, a mí o publica ya sol de medianoche, o no va  a ver ni un duro más de mi bolsillo, bueno, salvo por sus cómics).

Y por fin, tengo los otros dos que me quedaban de Komori, por fin, no voy a contar nada de ellos, porque no me los he leído, ahora mismo estoy con el de La resistencia (Laura Gallego), sí, no me he leído ningún libro de ella salvo el de la emperatriz de los etéreos que me resultó cansino y aburrido, eso sí, la portada preciosa, una lástima que no se pueda decir lo mismo de su interior, así que voy a meterme con este, también de la biblioteca, a ver si así me reconcilio con Laura Gallego.

El de Wunderkind me lo ha recomendado una templaria, que a mí ya sólo porque la acción transcurre en París, el escritor es italiano y wunderkind significa niño prodigio en alemán, ya me llama la atención por todos estos idiomas mezclados, lástima que sea otra saga, y que me haya dado cuenta después de comprarlo.

Eso es todo amigos.